No se me ocurre mejor manera de dar a conocer la temática del nuevo film del oscarizado Steven Soderbergh "Contagio". Y es que Warner Brothers Pictures tuvo la brillante idea de instalar, en el escaparate de una tienda abandonada de Toronto, una valla publicitaria previamente impreganda con varias bacterias naturales (moho y penicilina, entre ellas). El resultado, que pudo verse en vivo y en directo, no se hizo esperar: las letras que daban forma al título de la película se fueron descomponiendo poco a poco adoptando un color verdoso con esporádicas manchas rojas y una textura granulosa. Asqueroso, pero impactante.