En el año 2005 Banksy, cuya identidad sigue siendo un misterio, pintó nueve imágenes en el muro que separa Israel de los territorios palestinos en Belén. Todas ellas reivindican un mensaje político con la incuestionable creatividad del artista: una escalera mecánica hacia el otro lado del muro, una niña volando con la ayuda de unos globos o una cortina abierta mostrando un bonito paisaje son algunos de los grafitis que hoy atraen a miles de turistas.
Preocupado por la situación de los territorios palestinos, a la que hace referencia en muchas de sus obras, Banksy abrió el año pasado un hotel en Belén con el fin de impulsar el empleo y atraer el turismo. Situado justo enfrente del muro, el Hotel Walled Off cuenta con diez habitaciones decoradas con obras de Banksy y “las peores vistas del mundo”, según señalaba él mismo.
El hotel es hoy todo un éxito y Banksy ha querido impulsar aún más su repercusión lanzando una nueva colección de `souvenirs´ con su habitual calado político. Todos ellos se pueden adquirir en la página web del hotel.