Un estudio de Initiative, agencia de medios, sobre las mujeres españolas ha analizado en profundidad el comportamiento de las jóvenes de entre 14 y 24 años para averiguar cuáles son sus inquietudes y aspiraciones.
En targets con edades superiores a 25 años los estilos de vida también se van modificando. A medida que se cumplen años, buscan más la calidad y comodidad con respecto a su apariencia externa, se preocupan por su familia y por cuestiones económicas.
Si nos centramos más concretamente entre las jóvenes de 14 y 24 años, casi seis millones de la población española, las diferencias de estilos de vida varían bastante en función de si son estudiantes universitarias o no.
Las estudiantes universitarias (no trabajadoras) se definen como ambiciosas, interesadas en arte y cultura, buscadoras de calidad y confort, preocupadas por el medio ambiente y que están muy ligadas a sus amistades.
Buscando las diferencias entre las jóvenes no universitarias de entre 18 y 24 y universitarias, las primeras tienden a ser, en relación con toda la franja de edad, más conservadoras, tradicionales, orientadas a su familia y consideran que la seguridad financiera es importante.
Por su parte, las menores de 18 años son fácilmente
influenciables por otros, no se preocupan por el futuro, evitan responsabilidades y son fahion victims. Analizando más en profundidad su tiempo de ocio durante el fin de semana, las universitarias prefieren salir por la noche (73%) e ir al cine, al teatro o algún concierto (62%). En menor medida, dedican también tiempo a quedarse en casa leyendo o escuchando música (56%), ir de compras (42%) cuidarse (36%), visitar amigos y parientes (36%) y salir a dar un paseo. Las jóvenes de entre 18 y 24 no universitarias prefieren quedarse en casa (58%), salir por la noche (51%), y salir a dar una vuelta (44%). Finalmente, las adolescentes también prefieren quedarse en casa o salir a dar una vuelta, pero es el sector al que más le gusta ir de compras (45%), navegar por internet (26%) y jugar con la videoconsola (16%).
Con respecto a cómo pasan las vacaciones, existen también diferencias entre los tres grupos. Las universitarias menores de 25 años eligen como primera opción pasar sus vacaciones en la playa (32%) pero no tanto como aquellas de la misma edad no universitarias (53%) o las adolescentes (46%). Por el contrario, son las que más se quedan en la ciudad y las que más viajes organizados realizan. Las jóvenes no universitarias prefieren más el turismo rural y las vacaciones relacionadas con la salud y el bienestar. En relación a la forma que eligen para organizarlas, a pesar de que la mayoría estudia con profundidad todo con antelación, en comparación con los otros dos sectores son las que más dejan a la improvisación.
Por último, en relación con las actividades deportivas, las más jóvenes son más activas en este terreno (un 36% de las adolescentes practica deporte por lo menos una vez a la
semana), y prefieren el aerobic, el baile y la natación. Destaca su afición por el fútbol por encima de otros deportes tradicionales como el baloncesto o el voleybol. En el otro extremo aparecen las universitarias que son las que menos juegan al fútbol. Por el
contrario, prefieren la natación y el baile y, curiosamente, son las que más tiempo dedican a la acampada, más que al tenis o el baloncesto.