Hispack 2003 presenta la actualización del Libro Blanco del Envase y Embalaje

El Salón Internacional del Embalaje y el Departament d'Indústria, Comerç i Turisme de la Generalitat de Catalunya presentarán en Hispack 2003 una edición actualizada del Libro Blanco del Envase y Embalaje, una obra de referencia única para ayudar a las empresas del sector a implementar nuevas y eficaces estrategias comerciales, a partir del conocimiento del momento actual y de las tendencias de futuro que se vislumbran en el seno de esta industria.

Como se recordará, esta obra, que se publicó en junio del año 2000,  recogía a lo largo de 10 capítulos los datos generales del sector del envase y embalaje y de los subsectores que lo componen, así como la incidencia de la normativa medioambiental en la actividad de las empresas, el asociacionismo y la participación ferial, o el marketing y el diseño.

La excelente acogida dispensada a esta publicación por parte del sector y la falta de bibliografía especializada han animado a Hispack a actualizar los contenidos del Libro Blanco con el fin de que este estudio siga siendo una eficaz herramienta a la hora de tomar decisiones en relación con la inversión tecnológica, la gestión de la calidad, el diseño de envases, el cuidado medioambiental, la I+D+I, etc. De este modo, Fira de Barcelona adopta el compromiso de renovar, con motivo de cada edición de Hispack, los contenidos y las cifras del Libro Blanco para adecuar, con la máxima fidelidad posible, la realidad de cada uno de los subsectores que componen la industria del envase y embalaje con la coyuntura económica de cada momento. 

Las cifras del sector

Según el Libro Blanco del Envase y Embalaje, los principales indicadores recogidos muestran un sector en plena expansión, que no ha dejado de crecer en los últimos seis años. La evolución de esta industria se manifiesta en los siguientes datos: Una facturación estimada de 8.846 millones de euros (un 41% más que en 1997); una producción de casi 8 millones de toneladas anuales (con un incremento del 11,6%); y un aumento de un 15,4% del número total de empresas del sector y, en la misma proporción, del número de empleados, tomando también como referencia 1997. 

Sin embargo, este crecimiento no ha sido lineal en el tiempo, sino que ha experimentado altibajos, dándose en general mayores registros entre los años 1999 y 2000, que en el período 2000-2001, cuyos resultados, aunque satisfactorios, presentan leves incrementos, reflejo de la desaceleración económica que estamos viviendo.

Actualmente el sector del envase y embalaje en España está formado por 1.900 empresas  que dan empleo a 64.693 personas. Por subsectores continúan siendo los plásticos (con un 28%) y el cartón ondulado (con un 21,7%) los que mayor peso relativo tienen en el total de la facturación del sector. Por producción, el cartón ondulado (33,4%), seguido del vidrio (25,7%) y los plásticos (20,4%), lidera el ranquing. En cuanto a número de empresas, el primero es el subsector de los plásticos (45,8%), y a continuación el del maquinaria (26%).

Una de las principales características del sector del envase y embalaje en España es su gran concentración -tanto de las empresas como de la producción- en las zonas más industrializadas del país: Cataluña (46,9%); Madrid (14,6%); País Vasco (13,1%) y Comunidad Valenciana (6,9%), son las que registran los mayores porcentajes. El resto de Comunidades Autónomas acumulan solamente el 15,4% de las empresas del sector.

Crecimiento continuado

Este crecimiento del sector se explica por el fuerte aumento del consumo interno de envases y embalajes en todos los ámbitos económicos y de consumo. La presencia del sector del envase y embalaje se incrementa en áreas como la alimentación, industria, farmacia, droguería, cosmética, higiene, automoción, etc.

En este sentido, para atender este aumento del consumo interno, las empresas del sector han dedicado parte de sus recursos a invertir en nueva maquinaria, un hecho que pone de manifiesto el dinamismo y la importante capacidad de respuesta de esta industria a las demandas del mercado. Entre los sectores que más han invertido en modernizar su maquinaria destacan el cartón ondulado, el metal y el vidrio.

Asimismo, a juicio de los empresarios, en este período de tiempo se ha mejorado la competitividad de los productos españoles, no sólo en cuanto a relación calidad-precio, sino también en diseño. Paralelamente se ha dado una mayor diversificación de la oferta, con estructuras empresariales y procesos productivos más flexibles. Así, se observa un  incremento de las empresas que trabajan  con varias materias primas al mismo tiempo, con el fin de garantizar una mayor versatilidad en los productos.

Respecto al comercio exterior, Francia y Portugal continúan siendo los principales clientes del sector del envase y embalaje. Le siguen otros países de la Unión Europea como Alemania, Italia, Reino Unido, Bélgica y Holanda. En los últimos años ha aumentado ligeramente el número de empresas que exporta a algún país latinoamericano, destacando México, Chile y Venezuela dentro de este grupo. EE.UU. y Marruecos son también dos mercados receptores de productos de envase y embalaje españoles. 

Según las fuentes consultadas por TAYLOR NELSON SOFRES, empresa encargada de la redacción del Libro Blanco del Envase y Embalaje, los mayores logros del sector en España pasarán por atender en mayor medida los aumentos del consumo interno, reducir las importaciones y aumentar su presencia en los mercados exteriores.

Expectativas de futuro

En conjunto las expectativas del sector para los próximos años son optimistas. Según los empresarios consultados, todas las variables de esta industria continuarán creciendo en los próximos años, en especial, la facturación, la producción y la inversión; en cuanto a las magnitudes de importaciones, exportaciones; número de empleados e inversión en I+D; éstas permanecerán estables.

En la percepción de este escenario de futuro crecimiento influye la positiva evolución que han experimentado los indicadores económicos del sector; el aumento de la presencia del envase y embalaje en todas las áreas económicas y una mayor conciencia de las posibilidades reales de un mercado en expansión con una fuerte ventaja comparativa frente a otros países europeos.