La semana pasada más de 600 establecimientos de Kentucky Fried Chicken en el Reino Unidos se vieron obligados a cerrar sus puertas por falta de suministro de pollos. Ante tamaño desastre, la compañía y su agencia de cabecera, Mother London, se apresuraron a lanzar un anuncio gráfico para pedir disculpas al público. Y, la verdad, es que no pudieron ser más ingeniosos.
La pieza gráfica, publicada en los periódicos The Sun y Metro, modifica el orden de las letras que componen el logo de la compañía, KFC, para dar forma a un acrónimo muy reconocible: FCK, o lo que es lo mismo,“Fuck”, que viene a describir la metedura de pata a la perfección. La pieza incluye un vaso vacío de pollo frito y un texto en la parte inferior encabezado por la frase “Lo sentimos”.