El spot, obra de la agencia David&Goliath, no tiene desperdicio. Una rápida sucesión de disparates, cuya grandilocuencia y sinsentido crecen a medida que avanzan los segundos, componen una historia tan delirante como espectacular. Y es que lo que empieza siendo una intriga policial acaba convirtiéndose en un alucinante viaje en el tiempo para aterrizar en un centro ceremonial maya, pasando por una puesta en escena al más puro estilo de James Bond, la intervención de un cabreadísimo Poseidón y la irrupción de unos seres extraterrestres bastante juguetones. Y todo ello para dar a conocer el nuevo Optima de Kia.