Medio especializado en marketing, publicidad y comunicación
Medio especializado en marketing, publicidad y comunicación
La madrileña calle Preciados se convirtió el 17 de junio en un improvisado paraíso de la mano de tres adorables “Evas”, que tentaron a los viandantes armadas con cestos de jugosas manzanas.
Trataban con ello de evocarles el mundo de sexo y seducción sin límites que preside la polémica serie Californication, recién estrenada por la cadena Cuatro, y protagonizada por un irreconocible David Duchovny.
La original campaña de promoción ha sido una iniciativa de la propia Cuatro, MPG y la agencia de publicidad Kitchen. Bajo el lema “Caerás en la tentación, Californication”, que describe a la perfección la irreverente temática de la serie, se situó un “set de la tentación” en la céntrica calle, que incluía césped “paradisíaco” y árbol de la tentación. Tres actrices caracterizadas como “Eva”, con maquillaje corporal, largas melenas rubias y ligeras de ropa, sorprendieron a los paseantes con sus preguntas acerca de la tentación y con sus apetecibles manzanas.
Californication, estrenada por Cuatro el pasado jueves, viene precedida por el escándalo y, con tan sólo dos temporadas, ya cuenta con un Globo de Oro al Mejor Actor protagonista, David Duchovny (Expediente X). Creada por Tom Kapinos, responsable también de Dawson crece, uno de los mayores éxitos de los 90, esta serie se ha convertido en una pequeña joya que no deja indiferente a nadie.
Desde su lanzamiento, Californication ha sido controvertida y provocativa por las características del personaje y la habitual aparición de sexo explícito en cada episodio. Pero a diferencia de otras series, las escenas sexuales no son gratuitas, sino que forman parte necesaria de la serie, ya que la adicción al sexo es uno de los rasgos definitorios del personaje protagonista.
La serie narra la historia de Hank Moody, un novelista de éxito recién divorciado. Adicto al sexo y a las drogas, Moody lucha por sacar adelante su carrera y también a Becca, su hija de 12 años en su nueva ciudad: Los Ángeles. Sin embargo las cosas no parecen estar de su lado ya que el novelista se queda bloqueado mentalmente y es incapaz de escribir.
