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Dicen que en ocasiones la realidad supera la ficción y las elecciones presidenciales de este 2016 pueden ser un buen ejemplo de ello, sobre todo si al final el candidato republicano es Donald Trump y el demócrata, Hillary Clinton, algo que lógicamente aún está por ver.
Pero durante este mismo año asistiremos a otras elecciones presidenciales americanas tanto o más mediáticas que las que decidirán quien se sienta durante cuatro años en la Casa Blanca una vez Obama tenga que dejar el cargo. Nos referimos a las que tendrán lugar en la cuarta temporada de “House of Cards”, producción de Netflix, con Kevin Spacey como protagonista dando vida al presidente Frank Underwood.
La promoción lo es todo
Desde hace años vivimos una época dorada en lo que a series se refiere, de hecho, son muchos los que quieren acabar con ese término porque el periodo se está alargando tanto que ya no procede hablar de época dorada. Los títulos son muchos y muy variados, y la audiencia, lejos de contentarse pide más. Lógico. Las productoras compiten entre ellas y lo hacen a todos los niveles: guión, actores, realizadores, producción… Y desde hace un tiempo ha empezado a entrar con fuerza la promoción. Hasta hace poco el punto álgido del estreno de una serie ocurría unos meses antes con numerosos teasers y a medida que se acercaba la fecha, trailers más largos y más concisos. Pues bien, Netflix ha decidido darle una vuelta de tuerca más a esas prácticas y montar un cuartel general en el estado de Carolina del Sur para que Underwood pueda iniciar desde allí la campaña que le lleve de nuevo a la Casa Blanca. Hablamos de marketing experiencial en estado puro.
El televidente lo tiene que vivir
Fue el pasado diciembre que Frank Underwood decidió lanzar su propio anuncio electoral durante la transmisión televisiva del debate presidencial republicano. Aquello, que pillo a más de uno por sorpresa, fue tan solo el aperitivo de lo que estaba por venir.
Ahora sabemos que Netflix, de la mano de BBH New York, ha abierto el cuartel general de Underwood en el número 257 de South Main Street en la población de Greenville en el estado de Carolina del Sur. ¿Y por qué Greenville? Pues porque como los seguidores de la serie recordaréis el pueblo natal de Underwood es Gaffney, a tan solo 45 minutos de Greenville.
Dentro del edificio todo aquel que lo desee se puede fotografiar junto a una réplica del escritorio que se encuentra dentro del despacho oval además de poder hacerse con una chapa “FU16” y diferentes panfletos en los que se explica porque Frank Underwood es el mejor candidato para las generales de 2016.
La carrera electoral ha comenzado y nadie, a día de hoy, se atreve a hacer pronósticos. En la vida real la confrontación demócratas-republicamos puede echar chispas. En la ficción, todo parece indicar que Underwood ganará de calle.
