Medio especializado en marketing, publicidad y comunicación
Medio especializado en marketing, publicidad y comunicación
El madrileño Íñigo Aymat, de 34 años, ha sido elegido entre más de 13.000 candidatos para convertirse en uno de los 25 protagonistas que aparecerán en los envases McDonald's de todo el mundo en 2007, gracias al McDonald's Global Casting Call, un concurso puesto en marcha por la compañía para buscar estrellas anónimas entre miles de consumidores.
Íñigo y los otros 24 ganadores, procedentes de todos los rincones del mundo, aparecerán en los envases de los restaurantes realizando aquellas actividades por las que sienten verdadera pasión.
Su imagen será vista a diario por 50 millones de consumidores en todo el mundo.
Para acceder a esta oportunidad única, entre el 3 de abril y el 31 de mayo, los participantes debían redactar brevemente en la web mcdglobalcasting.com qué es lo que les gustaba hacer e ilustrarlo con una foto.
Entre junio y julio las candidaturas fueron estudiadas por un jurado formado por representantes de McDonald's y de las agencias que trabajan con la compañía.
El criterio de selección de los ganadores se estableció pensando en qué perfiles encajaban mejor con el espíritu im lovin it®: individualidad, inspiración, excepcionalidad, pasión y diversión.
La pasión de Íñigo Aymat por el paracaidismo y su foto surcando los cielos, le convirtieron en uno de los 25 afortunados.
Estamos muy orgullosos de contar con un español entre los ganadores de este concurso.
McDonald's trabaja día a día para acercarse a sus clientes hablando su mismo lenguaje, comenta Daniel Agromayor, Vicepresidente de Marketing y Comunicación de McDonald's España.
Esta vez, lo hemos hecho dándoles la oportunidad de ser, más que nunca, parte de nuestra realidad apareciendo en los envases haciendo lo que más les gusta.
Además, vamos a conseguir que 25 personas anónimas se sientan como estrellas, añade.
Entre el 21 y 27 de agosto, Iñigo Aymat y los otros 24 ganadores realizanron las sesiones de fotos en Londres, donde contaron con un fotógrafo de excepción, Nick Clements.
