La AUI logra retirar millones de impresiones de casinos

Tras la denuncia de la Asociación de Usuarios de Internet, la publicidad del juego de apuestas en páginas y cuentas de correo web en España es actualmente residual.Ahora, la AUI pide que sea la propia Comisión Nacional de Juego, órgano competente en esta materia, quien se pronuncie sobre esta cuestión.

En una carta dirigida a la Presidenta de la Comisión Nacional del Juego, Ana Pastor Julián, el presidente de la Asociación de Usuarios de Internet, Miguel Pérez Subías, solicita del máximo organismo de juego de apuestas en España "un pronunciamiento oficial" sobre la publicidad de los Casinos en Internet y otros juegos de azar con apuestas de dinero, para que las empresas españolas que conforman el sector tengan claro "lo que se puede y lo que no se puede hacer" a este respecto.

Gracias a la denuncia de la AUI, que recogía las quejas de los usuarios, las páginas que anteriormente servían publicidad de juegos de apuestas, muchas de ellas a la hora de mayor audiencia de los menores, optaron por retirarla, aunque en este tema la desinformación a la que se enfrentan los usuarios y las empresas de servicios es enorme.

En la misiva, el presidente de la AUI expone esta situación a la que tuvieron que enfrentarse recientemente miles de usuarios españoles, al comprobar cómo los principales portales y cuentas de correo web abusaban de este tipo de publicidad, en principio ilegal en España. Sin embargo, el pronunciamiento sobre la legalidad o no de la publicidad de juego de apuestas en Internet no es un tema que competa a la AUI, sino a la Comisión Nacional de Juego ya que los juegos de apuestas en la red son accesibles por ciudadanos españoles de todas las Comunidades Autónomas.

Por este motivo, la Asociación solicita este declaración oficial y quiere agradecer la colaboración de los proveedores de servicios de Internet que optaron por retirarla tras su llamamiento. La AUI insiste en que este tipo de comportamientos pueden ser a la larga contraproducente para el sector, ya que frenan la incorporación de nuevos usuarios de Internet en España y merman la calidad de la Red.