Con motivo del tercer aniversario de la aprobación de la llamada “Ley Mordaza”, Greenpeace ha lanzado “ProtestBox”, una irónica campaña que pretende denunciar el retroceso en las garantías democráticas relacionadas con los derechos de reunión y libertad de expresión.
Las “ProtestBox” emulan las “cajas de experiencias” comercializadas por numerosas empresas pero, en lugar de hacer un viaje romántico o disfrutar de una comida en un restaurante, permitirían participar en una gran variedad de modalidades de protesta: un fin de semana romántico de protesta, una manifestación en grupo frente al Congreso, oponerse a un desahucio en familia, sentir la emoción de colgarse de un edificio con una pancarta o vivir una jornada de resistencia pacífica.
En cada una de las modalidades, se refleja la cuantía de las sanciones que habría que abonar si se recibiera la correspondiente sanción. Por supuesto, se trata de una campaña simbólica y la manera de regalar estas cajas será a través de las redes sociales.