Crocs, cuando triunfa lo feo

Inspirándose en el zueco holandés, Scott Seamans, Lyndon “Duke” Hanson y George Boedecker Jr., todos ellos oriundos de Colorado (USA), diseñaron un zapato ideal para la navegación, antideslizante, impermeable y fácil de usar. Lo que probablemente no imaginaron nunca es que con el tiempo se convertiría en uno de los grandes iconos “fashion” del siglo XXI.

Al parecer todo comenzó en el año 2000 con un viaje navegando por el Caribe donde descubrieron un zapato ideal para navegar fabricado con un material denominado Croslite; era ligero, cómodo y perfecto para la navegación. Intrigados por el mismo decidieron comprar sus derechos para fabricar calzado. Ese fue el nacimiento de las Crocs que vio la luz dos años más tarde con el modelo “The Beach”.

 

 

Un éxito sorprendente

Quien podía imaginar que un modelo como es el zueco, vilipendiado en el mundo del calzado hasta límites insospechados, se convertiría en un icono de la moda más “cool”. Probablemente, muy poca gente. De hecho, en origen su target debían ser los navegantes, pero sorprendentemente una vez vieron la luz, empezaron a ponerse de moda. Eran cómodos, se salían de lo habitual y, además, con esos colores chillones, se veían a kilómetros y kilómetros. Todos aquellos que querían hacerse notar, habían descubierto un calzado que les permitía andar durante horas y a unos precios asequibles. Además, venían con numerosos complementos en forma de “chapitas” de decoración para personalizarlas al gusto de cada uno. Y no solo eso, a medida que su éxito se consolidaba, iban saliendo nuevos modelos, todos sobre una misma base, pero para momentos y estaciones distintas; las que llevaban el forro a lo borreguito causaron tanta o más sensación que las originales.

 

 

Su consolidación llega con el famoseo

Cuando “celebrities” como Justin Bieber, Lil Nas X, Post Malone, John Cena, Bad Bunny, Rauw Alejandro o la mismísima Madonna aparecen con unas Crocs en los pies, sabes que has triunfado. No solo eso; en 2016 el diseñador británico Christopher Kane encargó a Crocs suficientes pares para calzar a los modelos que iban a participar en su siguiente desfile. Crocs había derribado una nueva barrera y se había colado también en la pasarela de la alta costura. Le siguió Balenciaga y un diseñador como Salehe Bembury, colaborador de Yeezy y Versace en el pasado que también las hizo suyas dándoles su toque más personal. Bembury declaraba en GQ allá por 2021 que “es realmente genial que introdujeran un producto en el mercado que durante los primeros 10 años fue como una especia de broma que daba risa y ahora en cambio es tan icónico como las Chuck Taylor”.

En la actualidad Crocs incluye, además de una línea infinita de modelos y colores, ropa y accesorios. En 2021 anunció ingresos anuales de 2.310 millones de dólares empleando a más de 4.000 personas en todo el mundo. Y no solo eso; también ha comprendido cual es la realidad de los tiempos que vivimos, donde el compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente son obligados, con iniciativas como “Crocs Cares”, un programa mediante el cual ofrece a sus trabajadores la oportunidad de contribuir a la comunidad mientras trabajan, al tiempo que realiza donaciones para las causas más necesitadas.