Es personal... Miguel Zorraquino, Presidente de Zorraquino

Tu manía creativa

El orden, sin duda. Más que entendido como una manía, como parte indispensable del proceso de trabajo; el orden no limita la creatividad, sino que la potencia. Antes de empezar a diseñar, necesito que tanto mi espacio como mis ideas estén organizadas. Un entorno estructurado me da claridad y me permite sumergirme en el proceso creativo sin distracciones. Tanto en solitario como en equipo, sigo un proceso definido por fases, donde cada paso tiene una finalidad. Aunque pueda parecer contradictorio, y bajo mi experiencia, la creatividad no surge del caos, sino de un sistema de trabajo bien estructurado. Visualizo la función antes que la forma: ¿para quién diseño?, ¿qué necesidad cubre?, ¿cómo mejorará la experiencia de las personas usuarias? La conexión con el propósito del diseño me permite transformar ideas en soluciones tangibles y funcionales.

Tu decisión profesional importante

Emprender y no acomodarme, todavía a día de hoy. Fundar Zorraquino y transformarlo en lo que es hoy ha implicado tomar muchas decisiones arriesgadas. Desde crear la empresa hasta asumir el liderazgo en solitario, escalando servicios y equipo hasta convertirnos en una consultora estratégica consolidada tras más de 20 años. Cada paso ha marcado un punto de inflexión en mi carrera. Más recientemente, ese mismo espíritu me ha llevado a desarrollar Dealrock, un nuevo proyecto centrado en la optimización de marketing y ventas, que crece de forma independiente y representa uno de mis mayores retos en la actualidad. No sé si todas mis decisiones han sido valientes, pero sí determinantes en todo lo que he construido a nivel profesional y, de alguna manera, a nivel personal.