Promoción de Tomás Oliva en Shackleton
Tomás Oliva ha sido nombrado director creativo ejecutivo de la oficina en Barcelona de Shackleton para trabajar junto a Mónica Martorell, directora general. Diplomado en Comunicación Integral en ICOMI (Barcelona), certificado en Marketing por la Universidad de Berkeley (California) y en Publicidad y Creatividad en The School Agency por la Universidad Antonio Nebrija (Madrid), Oliva […]
Tomás Oliva ha sido nombrado director creativo ejecutivo de la oficina en Barcelona de Shackleton para trabajar junto a Mónica Martorell, directora general. Diplomado en Comunicación Integral en ICOMI (Barcelona), certificado en Marketing por la Universidad de Berkeley (California) y en Publicidad y Creatividad en The School Agency por la Universidad Antonio Nebrija (Madrid), Oliva empezó su carrera como redactor junior en la agencia Lowe RZR. A los dos años se incorporó a Contrapunto BBDO en Madrid como redactor, donde fue promovido al cargo de supervisor creativo primero y director creativo unos meses después. En 2005, tras pasar tres meses en FHV Amsterdam trabajando en proyectos internacionales del grupo BBDO, regresó a España para incorporarse a Contrapunto Barcelona como máximo responsable creativo, donde ha estado hasta incorporarse a Shackleton en Barcelona.
A lo largo de su carrera Tomás ha logrado numerosos premios en los principales festivales creativos nacionales e internacionales, desde el CdeC, los Laus o El Sol, el FIAP, El Ojo de Iberoamérica, hasta el Festival de Cannes. Ha trabajado para clientes como Loewe, Volvo, Barclays, Mercedes Benz, Canal+, Digital+, Vodafone, F.A.D (Fundación de ayuda contra la drogadicción), Turismo de La Rioja, Reckitt Benckiser (Nenuco, Reflex), Fundación FC Barcelona, Gas Natural Fenosa, Melia, Sanex Internacional. Y ha participado como jurado en festivales Internacionales como El Sol y los Golden.
Pablo Alzugaray, presidente de Shackleton, declaraba: "El nombramiento de un creativo con la trayectoria de Tomás confirma nuestra apuesta por Barcelona. La abrupta desaparición de Spanair en 2012, que era nuestro cliente más importante allí, fue un golpe económicamente muy duro. Ahora toca volver a crecer y Barcelona siempre ha sido un mercado que reconoce a los corredores de fondo".
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