La cadena de televisión americana HBO estrenó el pasado 15 de febrero la sexta temporada de la serie “Eastbound & Down”, protagonizada por Kenny Powers, un jugador profesional de beísbol que hecha por tierra toda su carrera por una mala racha.
Para su promoción, la agencia Grand Central Marketing realizó una acción especial que consistía en colocar pegatinas en cristales que simulaban que una pelota de beísbol mal lanzada los había roto. En ella, además se podía leer: “Kenny Powers was here, motherf&@#ers”. La frase no necesita traducción.
5.000 adhesivos han sido colocados en escaparates y espejos de bares deportivos y tiendas de licores de Nueva York y Los Ángeles, tratando de incidir directamente sobre el target de la serie: hombres de 18 a 34 años.
Desde la agencia, comentan que el hecho de que la gente pudiera robar las pegatinas constituiría una forma satisfactoria de interacción del público con la campaña, que estará en activo durante dos semanas.