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La Fundación Natura y la compañía de comunicación, eventos y gestión de asociaciones MCI junto con Ecoindustria, el Ayuntamiento de Salou y una donación particular de Lluis Viaplana, socio de Fundación Natura, han puesto en marcha un proyecto de Cooperación para el Desarrollo en el humedal de Lucre-Huacarpay, Perú.
El humedal de Lucre-Huacarpay se encuentra en el sudeste del país, dentro del Parque Arqueológico de Pikillaqta, a 29 Km. de Cuzco, en un lugar rodeado de montañas y a 3.070 m. de altura.
La principal problemática de la zona es la sobreexplotación de los recursos naturales, sea en el propio humedal de Lucre-Huacarpay, así como en su entorno inmediato.
Las montañas que constituyen la cuenca del río Lucre, que alimenta el humedal, están completamente deforestadas desde hace varios siglos.
La presión ganadera evita la recuperación del bosque y crea graves problemas de erosión y falta de agua durante la estación seca.
Además, las familias deben obtener leña de la cuenca para cocinar, para lo cual deben caminar a diario varios quilómetros, contribuyendo a su vez a no permitir la recuperación del bosque.
Fundación Natura enviará 100 cocinas solares, y la organización Solar Household Energy que trabajando conjuntamente con ECOAN, contraparte local de Fundación Natura, impartirá cursos de formación dirigidos a la población local para que ésta pueda realizar un uso adecuado de las mismas.
El objetivo principal es minimizar el impacto ambiental y la necesidad de leña por parte de la población local, promoviendo así, la conservación del bosque autóctono que Fundación Natura y ECOAN llevan restaurando desde el año 2004.
Las cocinas solares suponen una alternativa de bajo coste a la tradicional cocina de leña.
Son artefactos que permiten cocinar alimentos usando el sol como fuente energética.
Con ella se logra un ahorro de energía, más limpia y que no daña el medioambiente ni contamina, y se evita y sustituye el uso de hidrocarburos (combustibles fósiles o leña), al mismo tiempo que permite la regeneración espontánea de los bosques y su biodiversidad.
Además, ahorra tiempo y un esfuerzo importante a las familias que ya no necesitan caminar largas distancias para ir a buscar la leña.
Las cocinas solares también mejoran la salud de mujeres y niños que no inhalan los humos de las tradicionales cocinas de leña en sus casas mal ventiladas.
