BigBox cumple 20 años: crecer y transformarse sin perder la esencia

BigBox celebra dos décadas siendo un referente en el sector experiencial y su capacidad de crecer y transformarse sin perder su esencia. El contexto postpandemia aceleró una reflexión estratégica que impulsó a la compañía hacia un nuevo modelo: amplificar su propuesta más allá del evento, integrar disciplinas y evolucionar hacia un ecosistema capaz de conectar marcas y personas en múltiples momentos y formatos. Hoy, con la creación de Llámalo Equix, primera nueva marca del grupo, BigBox reafirma su compromiso con la innovación, la diversificación inteligente y la búsqueda constante de valor.

Ctrl. Este año cumplís 20 años lo cual es sin duda un gran hito. ¿Puedes hacer balance de todo este tiempo, desde vuestros orígenes hasta hoy, siendo como sois actualmente un referente del sector experiencial?

Xavi García Llop, CEO de BigBox.- Cumplir 20 años nos permite mirar hacia atrás con perspectiva y entender qué nos ha traído hasta aquí. Desde el inicio fuimos una estructura pequeña, muy centrada en la producción y en una ejecución impecable. Esa obsesión por el detalle, por pensar siempre en el cliente y por entregar experiencias memorables es la esencia que nunca ha cambiado y que nos ha convertido en un socio fiable para muchas marcas.

El sector evolucionó y nosotros entendimos que nuestro papel podía ir más allá del evento y que las marcas buscaban experiencias más estratégicas, más amplias y con mayor capacidad de impacto. Eso nos llevó a repensar nuestra marca, incorporar nuevos perfiles y ampliar nuestra propuesta.

Hemos crecido de forma sostenida, a doble dígito en los últimos años, porque supimos leer el mercado, sumar talento nuevo y ampliar nuestro alcance sin renunciar a nuestro propósito, crear experiencias que dejen huella con un estándar de calidad muy alto.

Durante estos últimos años, y sobre todo desde la pandemia, habéis puesto en marcha un plan de crecimiento focalizado en aportar valor a través de nuevos servicios y empresas. ¿Puedes hablarnos de ello y cuáles han sido las prioridades dentro de ese plan?

Activamos un plan muy ambicioso para el periodo 21-25. Apostamos fuerte con un cambio de marca y reposicionamiento que nos permitiera fortalecer nuestra visión de “full experiential”. Reforzamos la creatividad, nuevas capacidades y una dirección de desarrollo de negocio para impulsar la compañía tanto a nivel nacional como internacional. Este momento nos llevó a entender que debíamos ampliar nuestro alcance, sumar capacidad estratégica, contenido, herramientas digitales, data, medición y nuevos perfiles que complementaran nuestra especialización. El resultado fue inmediato, crecimiento en facturación, nuevos clientes y proyectos, pero, sobre todo, ganamos una claridad estratégica que hoy sigue guiándonos.

Otro punto fuerte ha sido la diversificación con especialización. En un sector tan competido como el de los eventos y las experiencias, debe ser imposible ser competitivo si no sumas nuevas disciplinas, interlocutores y experiencias, ¿no?

Todo evoluciona muy rápido y el mercado demanda innovación constante. Seguimos centrados en aportar valor desde la experiencia, pero entendiendo que esta no termina en un evento puntual. La experiencia hoy se extiende antes, durante y después, tanto en lo físico como en lo digital, con un foco muy grande en lo phygital.

Las experiencias siguen siendo nuestro foco y diversificar no es hacer más cosas, sino comprender qué necesitan las marcas y cómo conectar con las personas desde nuevas narrativas, formatos y canales. Y eso requiere sumar perfiles capaces de integrar estrategia, contenido, tecnología, data y creatividad.

Suponemos que ese plan tan ambicioso busca un crecimiento real y tangible tanto desde lo que es el negocio propiamente dicho como de una propuesta de valor que os haga ser lo más competitivos posible.

Buscamos no solo crecer en números, sino en propuesta de valor. Somos ambiciosos en nuestros objetivos y disfrutamos lo que hacemos. Contamos con un equipo diverso, implicado y muy alineado con los objetivos del grupo, y eso marca la diferencia. Se refleja en las propuestas y los clientes lo perciben.

Incorporar nuevas capas de valor, creatividad estratégica, contenido, tecnología, data y medición, nos permitió llevar los proyectos a otra dimensión. No es solo hacer experiencias más completas, sino más relevantes, eficientes y con mayor capacidad de retorno para las marcas.

El crecimiento se mide también en cómo nos perciben los clientes y cómo demostramos el impacto de lo que hacemos. Integrar medición y data ha sido clave. Hoy podemos acreditar qué funciona, por qué y cómo escalarlo. En un mercado cada vez más orientado al brandformance, esa capacidad se ha convertido en una ventaja competitiva real para nosotros.

En ese contexto, el sector de las experiencias vive un momento muy dulce y suponemos que esas sensaciones las notáis por parte de los clientes. ¿Qué buscan, qué demandan, cuáles son sus objetivos y prioridades cuando os contactan por primera vez?

Las marcas hoy buscan experiencias que vayan más allá del impacto puntual, que generen impacto emocional, pero también continuidad y retorno. Nos piden innovación con criterio, ideas nuevas apoyadas en datos, contenido relevante, activación de comunidades, formatos híbridos y experiencias phygitales capaces de amplificarse de manera orgánica.

Sobre todo, buscan partners que entiendan a las audiencias y generaciones, que sepan leer territorios culturales como gaming, música, deporte, wellness y más, y que puedan construir propuestas coherentes con cada código cultural.

Hablemos de “Llámalo Equix Exponential Thinking”, una nueva empresa que habéis lanzado dentro del grupo aprovechando este 20º aniversario. ¿Puedes hablarme de ella y qué hueco viene a cubrir dentro de vuestra estructura y filosofía empresarial?

BigBox detectó una oportunidad: ampliar la experiencia más allá del evento, entrar en nuevas capas de valor y acceder a otros presupuestos, territorios y audiencias. Pero hacerlo bien requería una estructura distinta, con identidad propia y perfiles especializados. Así nace Equix, una compañía independiente, pero conectada al grupo.

Y con el objetivo de responder una demanda clara del mercado, las marcas ya no solo quieren impactar, buscan experiencias medibles, personalizadas, amplificables y con retorno real.

Llámalo Equix diseña, produce y activa estrategias y experiencias de marca que se extienden en el tiempo (antes, durante y después) y en espacio (físico, digital y phygital). Basándose en el pensamiento exponencial, sumando a la creatividad y a la estrategia, los componentes de data y tecnología con un foco muy claro en las audiencias y en el negocio.

Desde la perspectiva de negocio, Equix permite ofrecer servicios más especializados y complementarios: contenidos, comunidades, properties y new retail, teniendo muy claro siempre las generaciones a la que van dirigidos y los territorios idóneos para amplificarlos, con un componente tecnológico muy presente.

Equix está liderada por Giovanna Angiolillo, quien aporta una mirada estratégica con foco en negocio y visión global, y por Alejandro Roldán, quien suma una visión más actual y conectada a las nuevas audiencias y territorios. Juntos, y con un equipo complementario de perfiles que aportan especialización y frescura, consolidan una propuesta integral.

Nuestro objetivo es seguir creciendo, incorporando nuevas disciplinas y construyendo un grupo sólido y escalable. Equix es el primer paso para crear un grupo donde podamos hacer crecer la EXPERIENCIA desde todos los ámbitos posibles y seguir siendo referentes en el marketing experiencial.