Ogilvy estaría muy orgulloso

Ctrl Control Publicidad.- En 2011 decides hacer realidad David, aprovechando el 100 cumpleaños de David Ogilvy. ¿Qué te llevó a poner en marcha el proyecto?

Fernando Musa, Fundador de David.- Vivíamos un etapa fantástica en Brasil. Un encaje perfecto de gente y talento soñando con lograr algo nuevo y valiente. Ogilvy Brasil experimentaba un periodo de enorme transformación y nos pareció que era el momento perfecto para empezar algo nuevo pero que tuviera las raíces de los valores de David Ogilvy.

Empezasteis en Sao Paulo y Buenos Aires, luego disteis el salto a Miami y recientemente habéis abierto en Madrid. ¿Cómo ha sido esa evolución y la apuesta por esas ciudades en estos 9 años de existencia?

En realidad empezamos en Sao Paulo y Buenos Aires porque eran los lugares donde vivíamos (risas). Por eso y porque nos parecía que el talento que podía venir de Brasil y Argentina resultaría una mezcla espectacular. Lo de Miami fue una decisión de negocio para poder estar cerca de Burger King. Y en cuanto a Madrid, los motivos son varios. Empezando por Pancho y siguiendo por la mezcla de talento que se nos ofrecía. Por tener un agencia en Europa y porque nos encantan aquellos lugares donde hay talento con el que trabajar. Pero volviendo a Pancho, sabíamos que quería empezar un nuevo proyecto en Madrid y yo buscaba un nuevo socio; el resto, cómo se acostumbra a decir, es historia. Madrid simboliza una nueva etapa dentro de David. Una operación de negocio combinada con otra cultural y de talento.

Precisamente por Pancho quería preguntarte: ¿por qué pensasteis en él para dirigir la oficina de Madrid? ¿qué creíais que podía aportar? 

Conocía a Pancho por su trabajo y sabía que su talento nos obligaría a hacer grandes cosas. Cuando me plantee la búsqueda de un nuevo socio, un nuevo liderazgo global, no me lo pensé dos veces: cogí el teléfono y le llamé de inmediato. Me presenté y 24 horas más tarde volaba hacia Madrid para conocernos en persona. Al cabo de diez días ambos empezamos a tener la sensación que aquello podía funcionar, y así fue.

Pancho es talento en estado puro. Además, tiene el hambre de hacerlo siempre lo mejor posible, quiere reinventar la industria y plantea la creatividad como una idea de negocio de marca. En definitiva, te puedo decir que es un apasionado de la profesión y esa pasión la transmite a la gente con la que trabaja. 

Si tuvieras que describir David en pocas palabras, ¿qué nos dirías?

David es algo muy personal. Queremos transformar negocios con ideas que nadie haya tenido antes. Queremos ser valientes, apasionados y repito, hacer que todo sea muy personal, muy cercano.

Los actuales son momentos convulsos (en el buen sentido de la palabra) y donde los cambios se suceden a ritmo de vértigo. ¿Qué sensaciones te deja el momento actual de la publicidad?

Lo primero que tenemos que entender es que ya no existen las “zonas de confort” ni reglas que debemos seguir para saber si algo funciona o no. Lo que tenemos que hacer es darlo todo hoy sabiendo que mañana seguiremos en la lucha. Podemos controlar lo que podemos controlar, que es nuestro trabajo y nuestras ideas, así que lo que tenemos que hacer es continuar trabajando. Pero eso sí, y me parece algo de capital importancia: tenemos que amar el negocio, la creatividad, las ideas. De lo contrario no tiene sentido seguir en esta profesión. Vuelvo a lo de la pasión que te comentaba antes; me parece el criterio más fundamental en los tiempos que vivimos. Necesitamos que la gente crea realmente en el poder de las ideas y de la creatividad. 

Desde el punto de vista de los clientes, ¿cómo es vuestra relación con ellos y qué esperan de David?

Antes que nada, decir que hablamos de relaciones largas. Relaciones largas porque la transparencia, en todos los sentidos, es nuestra prioridad número uno y además, un compromiso absoluto por proporcionar las mejores ideas que estén a nuestro alcance. Lo que buscamos es mejorar cada día. David Ogilvy tenía una frase y un concepto que giraba en torno al término “Divine Discontent” (Descontento Divino), que significa que siempre puedes ir más lejos, siempre puedes hacerlo mejor, así que creo que los clientes quieren de nosotros son no solo ideas que tengan la capacidad de transformar sus negocios pero también se sientan orgullosos de ser parte de ellas.

Uno de vuestros clientes más emblemáticos y para el que estáis haciendo cosas espectaculares es Burger King. ¿Realmente Fernando Machado y compañía son tan “guays” como parecen?

Lo es y lo son. No es posible hacer un gran trabajo sino tienes a un gran cliente. Pero también te diré que es muy exigente y muy ambicioso. Siempre quiere más y lucha buscando en todo momento la grandeza. Creo que el trabajo habla por si solo.

El resto de clientes, ¿os piden que su publicidad sea igual de rompedora que la de BK? ¿Es eso posible?

Es posible hacer siempre más y mejores cosas por tus marcas. Pero cada anunciante debe encontrar su propio camino. Sin embargo, si puedo decirte que Burger King nos inspira a todos.

¿Nos podrías dar cuatro ideas que consideres vitales para ser exitoso sin perder el norte?

La tecnología no es un fin en si misma. La tecnología trabaja para una idea y no al contrario. Debemos ser conscientes que la tecnología es probablemente el mayor cambio que la humanidad está viviendo y mientras trabajamos con personas y marcas, necesitamos encontrar la manera de disfrutar, sentir y ser parte de la tecnología que existe hoy en día.

Han sido 9 años espectaculares pero la sensación desde fuera es que lo mejor está por venir, ¿te parece una percepción correcta?

Sin duda. Así lo esperamos aunque sabemos que no será fácil. Pero si pienso en como ha ido todo hasta ahora, lo creo realmente. Hasta ahora todas las piezas han ido encajando, los astros se han alineado y confío ciegamente en que así siga. Que Dios nos bendiga a todos.