Medio especializado en marketing, publicidad y comunicación
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Existen múltiples maneras de especular en los mercados financieros para limitar pérdidas o multiplicar ganancias con una apuesta. Los bróker lo llaman mercado de derivados y sus opciones de contratos suelen ser de “put” (de venta) o de “call” (de compra).
La Guida se presenta como una aseguradora (“asegura tu décimo”) comprometiendo la devolución de los impuestos derivados de un premio de lotería en caso de ser agraciado. Lo que pasa es que una compañía de seguros es aquella cuya actividad económica consiste en producir el servicio de seguridad cubriendo determinados riesgos económicos que pudieran producirse por un imprevisto (un accidente, un fenómeno meteorológico, un robo, etc). Llamar “riesgo” al pago de impuestos no es asumible para una sociedad responsable, y menos en una ganancia extraordinaria derivada de un premio de lotería.
No es legítimo, desde un punto de vista de sostenibilidad, negar la consecuente contribución fiscal de las grandes ganancias y tratarla como una especulación financiera más.
La publicidad engaña. La Guinda no es una aseguradora sino un juego lucrativo más.
