Oreo es una marca familiar. Puede que hace cincuenta años esto pareciera incompatible con un activismo por la visibilidad LGTBI+, pero ahora no es así y el apoyo a los familiares que dan el paso para afrontar la situación con normalidad y dignidad también es un problema familiar que requiere el apoyo de todos, y no sólo una vez en la vida, y el slogan de la compañía “Bringing families together for over one hundred years” tiene todo el encaje posible con esta campaña que han llamado “#LifelongAlly”. Buena campaña de Oreo para hacer de éste un mundo más digno para las familias. Y además, una gran película firmada por una gran directora del colectivo, Alice Wu. El talento no entiende de género, y el éxito comercial tampoco.