La marca de agua en lata Liquid Death (llamada así porque “mata la sed”) y la agencia creativa Callen han lanzado una línea de animales de peluche llamada “Cutie Polluties”. Y, si bien los muñecos son una monada, hay algo en ellos muy perturbador: desechos de plástico como pajas, botellas, tapones y bolsas salen de sus entrañas o se enredan en sus cuerpos. La idea es, por tanto, despertar conciencias sobre el incremento de la contaminación de mares y océanos con basura plástica y sus fatales consecuencias en la fauna marina.
Diseñada por el estudio Standard Transmission, esta edición limitada de peluches ha sido fabricada con materiales 100% reciclados o biodegradables. Está disponible en la tienda online de Liquid Death a un precio de 75 dólares la pieza y la marca donará el 50% de los beneficios obtenidos con su venta a proyectos destinados a limpiar los mares.