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La despedida de Joaquín Sánchez, una de las grandes leyendas del fútbol español y el eterno capitán del Real Betis Balompié, tuvo lugar el pasado 6 de junio en la casa de todos los béticos, el Estadio Benito Villamarín. Alrededor de 60.000 personas quisieron decir adiós al futbolista en una noche cargada de momentos emotivos.
La ocasión merecía un homenaje por todo lo alto, digno de la gran figura futbolística que ha sido Joaquín desde sus inicios hasta su retirada. Y no pudo ser de otra forma que con un partido amistoso y una fiesta para celebrar su gran trayectoria en el mundo del fútbol. Para Darío Regattieri, CEO de beon. Worldwide: “Es todo un honor poder darle el adiós a Joaquín, uno de los grandes de este país, desde el corazón del Betis y celebrar con todos los béticos y con todos los aficionados del fútbol una grandísima noche”. beon. Worldwide se encargó de la producción del evento, llevando a cabo la regiduría de la gala, las activaciones, las actuaciones que tuvieron lugar durante el homenaje y el DJ set que amenizó la jornada, así como el espectáculo de fin de fiesta.
Uno de los grandes retos a nivel de producción fue el montaje y desmontaje hasta en dos ocasiones del escenario circular de 8 metros de diámetro, ya que cabe destacar que se realizó en menos de 5 minutos.
Para las activaciones se implantaron diferentes acciones ideadas para hacer que todos los asistentes, tanto adultos como pequeños, pudiesen disfrutar al máximo de la experiencia. Por un lado, se implantó una acción con realidad aumentada, a través de la cual los aficionados podían sacarse un selfie con Joaquín y recibir la fotografía en su correo electrónico para poder compartirla en redes sociales.
Otra de las activaciones que se implantaron fue una acción de Kinect para realizar un cromo personalizado con la camiseta de Joaquín. Para hacer alusión a la afición y al “piel con piel”, se creó un espacio en el que poder tatuarse el mítico “Joa17ing” o el escudo del Betis.
El momento del pasillo fue uno de los más emocionantes de la jornada. Estuvo formado por niños pertenecientes a la Fundación Joaquín Sánchez, a la cual fueron destinados todos los beneficios del partido, quienes se encargaron de recibir y animar a los jugadores en su camino hacia el campo de juego, vestidos con camisetas que lucían el número 17 del jugador. Además, se repartieron de forma gratuita camisetas con el mismo número que se lucieron al inicio del partido al ritmo del himno oficial del Real Betis Balompié.
Como maestra de ceremonias para el homenaje se eligió a Eva González, por su arraigo con Andalucía y el Betis y como artista invitada a Niña Pastori. Además, la velada estuvo amenizada con música en directo por DJ Mëstiza.
El broche de oro llegó con el fin de fiesta, que estuvo compuesto por una vuelta de honor del jugador acompañada por un espectáculo de fuegos artificiales y de chispa fría, coordinado con una banda sonora de música emotiva, para rendirle un merecido tributo a Joaquín y dar por concluido el vibrante homenaje.
