La marca personal como estrategia de comunicación

Si, además, esos profesionales trabajan por cuenta ajena o son los responsables de sus empresas cobra una especial relevancia porque los planes de marca personal deberían de estar siempre incluidos en las estrategias globales de comunicación.

Las empresas, las marcas tienen, cada vez más, la necesidad de tener alma y de conectar con sus públicos objetivo a través de la empatía. Ahora ya no quieren figuras despersonalizadas, quieren saber qué nombres son los que están detrás de los productos o servicios que compran, qué les mueve, cómo son y sobre todo qué piensan y cómo proyectan sus ideas de cara al exterior. ¿Por qué son mujeres y hombres de éxito?

Alinear esas marcas personales con la estrategia de comunicación de la empresa y asociar ambos valores es clave para llevar un mismo rumbo y conseguir mejores resultados. Necesitamos buenos embajadores de nuestras marcas, expertos comunicadores que puedan visibilizar también desde su posición todo lo que se debería dar a conocer al exterior.

¿Por qué la marca personal aporta valor a nuestra estrategia de comunicación? Humaniza la empresa. Asocia valores personales con valores empresariales. Genera confianza y credibilidad. Muestra dinamismo y refuerza claramente el mensaje de cualquier institución.

No hay mejor embajador de nuestra marca que nuestros empleados o los creadores de una idea o proyecto. Tomar la voz para ellos es determinante a la hora de diferenciarse del resto. Es la era de la marca personal y si aún no te has dado cuenta estás a tiempo de empezar a trabajarla de forma individual o dentro de tu organización.