Uno de los problemas sociales que tiende a crecer en nuestro modelo de sociedad es la soledad no deseada, especialmente en edades avanzadas. Sanex ha entendido que la metáfora de acercamiento humano “piel con piel” funciona para su marca de jabones. Por eso dedica la actividad de voluntariado de sus empleados a proporcionar esa compañía, esa “piel con piel” con personas afectas, además de contribuciones económicas a una fundación, Nadiesolo, con la que colaborará activamente. Además, lo acompaña de una campaña visual, que realmente es lo de menos cuando el engagement se produce por el voluntariado de los empleados.