La polémica suscitada por una campaña de radio de McDonald´s en Canadá no es tan sangrante como el anuncio racista de H&M y, sin embargo, también nos deja un tanto perplejos ante la falta de tacto y sensibilidad social que demuestra. La cuña de radio en cuestión sugería que valía más la pena gastarse 5 dólares en un menú de McDonald´s que pagar la entrada de un museo. De hecho, la actriz que interpretaba a una guía de museo en la campaña decía: "Había dinosaurios y luego no había. Vale, pueden salir por la tienda de souvenirs". Por supuesto, la Asociación de Museos de Canadá puso el grito en el cielo y la compañía de comida rápida se vio obligada a disculparse y retirar el desafortunado anuncio. Y es que cuando una marca tan poderosa como McDonald´s ataca al sector cultural, que suele luchar con uñas y dientes para educar a la sociedad con presupuestos generalmente muy bajos, la polémica es inevitable. Especialmente cuando la hamburguesa es el arma arrojadiza.