Últimamente no se habla de otra cosa en los medios, las redes sociales y las tertulias: el descontrolado precio de la electricidad y la dificultad para entender los tramos horarios en los que el precio de la luz es más o menos alto. En este contexto, la agencia de publicidad Shackleton presenta “Prudent Lights”, las luces de Navidad programadas para que brillen en las horas en la que la electricidad es más barata y se apaguen discretamente en las demás. Para Juan Silva, Director creativo ejecutivo de Shackleton: “La idea era un pequeño guiño humorístico al desastre de la factura de la luz y, ya que estamos, contrarrestar un poco el exceso de almíbar navideño”.
Cómo funcionan
“Prudent Lights” se presentan en un spot en clave de humor que narra el encuentro sorpresa que le prepara una familia a su abuela, Pruden. Para dejar con la boca abierta a la cabeza de familia, sus hijos y nietos le decoran toda su casa con llamativas luces para las que se necesitan muchos vatios, logrando su objetivo, pero no con el efecto deseado.
Y para compartir esta novedosa solución, Shackleton va a poner en marcha sorteos en sus cuentas de Instagram, Twitter y LinkedIn, para que cualquier persona que esté interesada pueda tener sus “Prudent Lights”.