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El pasado mes de mayo el Real Madrid se hizo con su decimotercera Champions League y, por cuarta vez, EDT Eventos estuvo a su lado. Para ello, se encargó de crear una experiencia única entorno a este evento "3 en 1", que incluía la retransmisión de la final en el Estadio Santiago Bernabéu, la celebración en la Plaza de Cibeles y el festejo en el Estadio con los jugadores.
El planteamiento para la retransmisión del partido fue de ocho pantallas gigantes LED de alta definición distribuidas en forma de octágono en el césped del Estadio. De esta forma, los 80.000 asistentes contaron con una excelente visión del encuentro. Una puesta en escena que se amplió cuando el Real Madrid se proclamó campeón, gracias a un cilindro LED situado en el centro del campo que cobró vida dando lugar a un espectáculo audiovisual.
Con la Champions en el bolsillo, se puso en marcha el "Operativo de Cibeles". En pocas horas, la plaza contaba un set desde donde Dj Pulpo animaba a la afición y con una pasarela 360º en torno a la fuente, por la que los jugadores pudieron ofrecer la copa a los seguidores allí reunidos.
Tras celebrar su triunfo en Cibeles, el equipo se dirigió al Santiago Bernabéu, donde esperaba el broche final. Uno a uno, los jugadores hicieron aparición de una manera nunca antes vista: dos pantallas proyectaban un vídeo presentación de cada futbolista para, acto seguido, abrirse gracias a potentes brazos robotizados y dar paso a los jugadores. Tras esta espectacular salida, atravesaban un túnel de láser escoltado por cañones de luz y FX y ascendían al cilindro central del campo, donde se unían a sus compañeros de equipo. Desde ahí, el Real Madrid alzó la copa de la mientras un espectáculo de pirotecnia iluminaba el cielo de Madrid.
